Cómo Aprender A Soltar El Pasado. Trucos Y Recomendaciones

Muchas personas llevan un peso muy grande en sus hombros debido a eventos o relaciones del pasado que les hicieron mucho daño. Si no aprendes a soltar el pasado, te estás robando la felicidad que podrías estar experimentando en el presente.

Aprender a dejar ir el pasado puede ser difícil, pero si estás dispuesto a hacer el trabajo necesario, puedes lograrlo. Aquí hay algunos consejos para ayudarte a soltar el pasado y seguir adelante con tu vida.

Recuerda que el pasado ya no está aquí.

Una de las razones por las que es difícil soltar el pasado es porque aún estás viviendo en él. Si sigues pensando en lo que sucedió, en lugar de en el presente, estás retrasando tu propio proceso de curación.

Es importante recordar que el pasado ya no está aquí. Lo que sucedió ya no tiene control sobre tu vida. Si sigues viviendo en el pasado, te estás perdiendo la oportunidad de vivir una vida plena y feliz en el presente.

Acepta lo que sucedió.

Otra razón por la que es difícil soltar el pasado es porque no has podido aceptar lo que sucedió. A veces, es difícil aceptar que las cosas salieron mal. Sin embargo, es importante recordar que no puedes cambiar lo que sucedió. Tienes que aceptar lo que sucedió y seguir adelante.

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Aceptar lo que sucedió no significa que estés de acuerdo con lo que sucedió. Significa que has aceptado que sucedió y que ahora estás listo para seguir adelante.

Perdónate a ti mismo.

Una de las cosas más difíciles de hacer cuando se trata de soltar el pasado es perdonarse a sí mismo. Si te sientes culpable por lo que sucedió, es posible que te cueste mucho soltar el pasado. Es importante recordar que no eres perfecto y que todos cometemos errores. No puedes cambiar lo que sucedió, pero puedes cambiar cómo respondes a ello. Si no te perdonas a ti mismo, te estás impidiendo seguir adelante.

Hable con alguien de confianza.

Otro consejo útil para soltar el pasado es hablar con alguien de confianza acerca de lo que sucedió. A veces, es útil tener a alguien a quien contarle lo que sucedió. Esto te ayudará a procesar lo que sucedió y te permitirá ver las cosas desde una perspectiva diferente. Si no tienes a nadie con quien hablar, considera la posibilidad de buscar ayuda profesional.

Sigue adelante con tu vida.

Un último consejo para soltar el pasado es seguir adelante con tu vida. Si sigues viviendo en el pasado, te estás perdiendo la oportunidad de vivir una vida plena y feliz en el presente. Es importante enfocarse en el presente y en lo que puedes hacer para mejorar tu vida. Si sigues viviendo en el pasado, te estás robando la felicidad que podrías estar experimentando en el presente.

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¡Aprende a soltar el pasado y crea un anclaje al presente ...

APRENDE A SOLTAR EL PASADO (Enfoque Desarrollo y ...

¿Cómo soltar y dejar ir el pasado?

La mayoría de nosotros llevamos nuestro pasado con nosotros, y a veces este pasado puede ser pesado. Es natural querer protegernos del dolor que experimentamos en el pasado, pero a veces esto significa que nos aferramos a ese dolor y no podemos dejarlo ir. Si estás luchando por soltar el pasado, aquí hay algunos consejos que pueden ayudarte.

En primer lugar, debes reconocer el dolor que sientes. A menudo, el dolor del pasado se esconde debajo de la superficie y no nos damos cuenta de que estamos llevándolo con nosotros. Toma un tiempo para explorar lo que estás sintiendo y dónde están esos sentimientos.

También es útil identificar la historia que te estás contando a ti mismo sobre tu pasado. ¿Qué significa para ti lo que sucedió? ¿Estás siendo injusto contigo mismo? ¿Estás culpando a otros de cosas que no son responsables?

Una vez que hayas identificado el dolor y la historia que te estás contando, puedes comenzar a trabajar para soltarlo. Esto puede significar hacer una lista de todo lo que te está molestando y qué puedes hacer para cambiarlo. También puedes escribir una carta a la persona o las personas involucradas en el pasado y decirles todo lo que sientes. O puedes simplemente tomar un tiempo para llorar y permitir que el dolor salga.

Sea cual sea el enfoque que elijas, es importante tener en cuenta que el proceso de soltar el pasado puede llevar tiempo. No esperes que todo cambie de la noche a la mañana. En su lugar, date el tiempo y el espacio para sanar.

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¿Cómo soltar el pasado psicología?

El pasado psicológico es un conjunto de experiencias, recuerdos y aprendizajes que han dejado huella en nuestra forma de ser y estar en el mundo. A veces estas huellas son positivas y nos ayudan a afrontar los retos de la vida de una manera más efectiva.

Otras veces, sin embargo, estas huellas son negativas y pueden estar asociadas a traumas o eventos dolorosos. En estos casos, puede resultar muy difícil soltar el pasado y dejar de aferrarse a las experiencias negativas.

Existen diversas técnicas y estrategias que pueden ayudarnos a soltar el pasado y a afrontar el presente y el futuro de una manera más saludable. En primer lugar, es importante reconocer que el pasado ha dejado huellas en nuestra forma de ser y que estas huellas influyen en nuestro presente. Aceptar esto es un primer paso importante para poder trabajar con las experiencias negativas del pasado.

En segundo lugar, es útil explorar qué significado le damos a esas experiencias y qué papel juegan en nuestra vida actual. Muchas veces, nos aferramos a las experiencias negativas del pasado porque creemos que nos definen o porque nos proporcionan algún tipo de estabilidad emocional.

Si somos capaces de cuestionar estos significados, podremos darnos cuenta de que no necesitamos seguir aferrándonos a ellos. Por último, es importante tener en cuenta que el pasado no tiene por qué seguir dictando nuestro presente y nuestro futuro.

El pasado es una parte de nuestra historia, pero no tiene por qué definirnos como personas. Somos mucho más que las experiencias que hemos tenido en el pasado. Tenemos la capacidad de decidir cómo afrontar el presente y el futuro, y podemos escoger la forma en que queremos que nos vean los demás.

¿Qué es soltar el pasado?

Soltar el pasado significa dejar ir lo que ya no está en nuestro control y concentrarnos en el presente. A menudo, el pasado está lleno de recuerdos dolorosos e insatisfactorios que nos pesan y nos impiden avanzar. Sin embargo, si somos capaces de soltar el pasado, podemos abrirnos a nuevas experiencias y dejar ir el dolor.

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Soltar el pasado puede ser difícil, pero es posible si estamos dispuestos a trabajar en ello. Primero, debemos aceptar que el pasado ya no es parte de nuestra vida y que no podemos cambiarlo. Esto puede ser muy difícil, especialmente si el pasado fue doloroso o traumático. Sin embargo, debemos recordar que el pasado no define quiénes somos y que podemos elegir cómo vivimos el presente.

Una vez que aceptemos el pasado, podemos comenzar a dejarlo ir. Podemos hacer esto hablando sobre nuestros sentimientos con un amigo o terapeuta, escribiendo sobre ellos o simplemente tomando un tiempo para pensar en lo que queremos para nuestro futuro. Es importante tener en cuenta que no se puede borrar el pasado, pero podemos aprender de él y usarlo para crear un futuro mejor.

¿Por qué pienso mucho en el pasado?

Hay muchas razones por las que podríamos estar obsesionados con el pasado. A veces, nuestros recuerdos son lo único que nos queda de una persona o un momento que amamos. Otras veces, el pasado puede ser un recordatorio de lo que no queremos que vuelva a suceder.

En cierto modo, pensar en el pasado puede ser una forma de protegernos del futuro. Nos permite analizar lo que hicimos para llegar a donde estamos y tomar medidas para evitar caer en los mismos errores. Pero pensar demasiado en el pasado también puede ser perjudicial. Si estás atrapado en tus recuerdos, te estás perdiendo la vida que estás viviendo ahora.

Vivir en el pasado te impide disfrutar de las cosas buenas que están sucediendo en tu presente. También puede ser muy doloroso revisar un pasado lleno de traumas o dificultades. A veces, es mejor dejar ir el pasado y seguir adelante.

Si te encuentras obsesionado con el pasado, quizás necesites hablar con un terapeuta. Pueden ayudarte a identificar los motivos de tu obsesión y ofrecerte estrategias para dejar de pensar tanto en el pasado.

Preguntas Relacionadas

¿Por qué es importante aprender a soltar el pasado?

Después de una ruptura, es normal que te sientas triste, confundido e inseguro. Sin embargo, debes evitar aferrarte al pasado y aprender a soltarlo. Si continúas aferrándote, te estás impidiendo avanzar y vivir la vida que mereces.

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Aquí te explicamos por qué es importante aprender a soltar el pasado:

1. Te estás impidiendo ser feliz

Si sigues aferrado al pasado, no podrás disfrutar del presente. La tristeza y la angustia que sientes solo te están impidiendo ser feliz. Debes aceptar que la relación se terminó y seguir adelante.

2. No podrás conocer a nadie nuevo

Aferrarse al pasado también significa cerrarse a la posibilidad de conocer a alguien nuevo. El dolor y la tristeza que sientes te están impidiendo abrirte a nuevas experiencias y conocer gente nueva.

3. Te estás perdiendo la oportunidad de ser feliz

Si sigues aferrado al pasado, estás perdiendo la oportunidad de ser feliz. Debes dejar ir el dolor y la tristeza para poder seguir adelante y encontrar la felicidad.

4. Estás dañando tu autoestima

Aferrarse al pasado también puede dañar tu autoestima. Si sigues obsesionado con la persona que te hizo daño, estás permitiendo que el dolor y la tristeza controlen tu vida. Debes aprender a dejar ir el pasado para poder recuperar tu autoestima.

5. Estás creando más problemas

Aferrarse al pasado también puede crear más problemas. Si sigues rumiando lo ocurrido, solo estás generando más dolor y tristeza. Debes aprender a dejar ir el pasado para poder superarlo.

Aprender a soltar el pasado es esencial para poder seguir adelante y ser feliz. Si sigues aferrado al pasado, te estás impidiendo avanzar y disfrutar del presente. Debes aceptar que la relación se terminó y seguir adelante.

¿Cómo podemos superar nuestros traumas y mochilas emocionales?

La psicología nos enseña que el pasado siempre nos acompaña. Nuestras experiencias, buenas o malas, forjan nuestra personalidad y la forma en que vemos el mundo. A veces, estas experiencias pueden ser dolorosas o traumáticas y quedarse grabadas en nuestra mente, lo que se conoce como mochila emocional. Estos recuerdos pueden llegar a ser tan perturbadores que nos impiden llevar una vida normal y feliz.

Afortunadamente, la psicología también nos ofrece una serie de herramientas para superar nuestros traumas y mochilas emocionales. Con el tratamiento adecuado, podemos aprender a afrontar nuestros recuerdos dolorosos y dejar de dejarlos controlar nuestras vidas.

¿Qué es un trauma?

Un trauma es un evento estresante o doloroso que causa una reacción emocional intensa y desproporcionada. Los traumas pueden ser derivados de eventos reales o imaginarios, y se producen cuando nos sentimos amenazados o heridos de alguna forma.

Los traumas pueden afectar a cualquier persona, independientemente de su edad, s3x0 o condición social. Algunos ejemplos de eventos traumáticos incluyen:

• Un accidente

• Un ataque terrorista

• Una agresión sexual

• Un terremoto

• Un incendio

• Un huracán

• La muerte de un ser querido

Los traumas pueden tener un impacto devastador en nuestras vidas, pero es importante recordar que todos somos capaces de superarlos. Con el tiempo y el apoyo adecuados, podemos aprender a afrontar nuestras experiencias dolorosas y seguir adelante con nuestras vidas.

¿Qué es una mochila emocional?

Una mochila emocional es un conjunto de recuerdos y experiencias dolorosas que llevamos con nosotros a lo largo de nuestras vidas. Estos recuerdos pueden estar relacionados con eventos traumáticos, como un accidente o una agresión sexual, o con experiencias más comunes, como el divorcio de nuestros padres o el bullying en el colegio.

Cargar una mochila emocional puede ser muy pesado y puede impedirnos llevar una vida plena y feliz. Sin embargo, es importante recordar que todos tenemos mochilas emocionales y que todos podemos aprender a lidiar con ellas. Con el tratamiento adecuado, podemos aprender a afrontar nuestros recuerdos dolorosos y dejar de dejarlos controlar nuestras vidas.

¿Cómo podemos superar nuestros traumas y mochilas emocionales?

Afortunadamente, la psicología nos ofrece una serie de herramientas para superar nuestros traumas y mochilas emocionales. Con el tratamiento adecuado, podemos aprender a afrontar nuestros recuerdos dolorosos y dejar de dejarlos controlar nuestras vidas.

Algunas de las técnicas más utilizadas para superar el trauma y la mochila emocional incluyen la terapia de conversación, la terapia cognitivo-conductual y la terapia de exposición. La terapia de conversación es una forma de terapia psicológica que se centra en el diálogo entre el terapeuta y el paciente.

En esta forma de terapia, se busca crear un espacio seguro y confidencial en el que el paciente pueda hablar libremente de sus experiencias y sentimientos. La terapia de conversación puede ser muy útil para aquellas personas que han sufrido un trauma, ya que les permite expresar sus sentimientos y comenzar a elaborar una nueva historia.

La terapia cognitivo-conductual es otra forma de terapia psicológica que se centra en el cambio de pensamientos y comportamientos negativos. Este tipo de terapia busca ayudar al paciente a identificar y cambiar los pensamientos y comportamientos que están contribuyendo a su ansiedad y estrés.

La terapia cognitivo-conductual puede ser muy útil para superar el trauma y la mochila emocional, ya que ayuda al paciente a reconstruir su historia y a aprender nuevas formas de afrontar sus experiencias dolorosas.

La terapia de exposición es una forma de terapia psicológica que se centra en enfrentar a los pacientes a sus miedos y ansiedades. Durante la terapia de exposición, el paciente será expuesto de manera gradual a las situaciones o recuerdos que le causan ansiedad.

Esta forma de terapia puede ser muy útil para superar el trauma y la mochila emocional, ya que ayuda al paciente a enfrentar sus miedos y a aprender nuevas formas de afrontar sus experiencias dolorosas.

¿Cómo podemos dejar de aferrarnos a lo que ya no nos sirve?

Desde el punto de vista psicológico, el apego se define como el vínculo afectivo que une a una persona con otra. Este vínculo puede ser positivo y saludable, como el que existe entre una madre y su hijo, o negativo y dañino, como el que surge de la dependencia emocional.

Cuando hablamos de aferrarnos a algo, nos estamos refiriendo a la tendencia que tenemos las personas de persistir en una situación, actitud o comportamiento, aun cuando esto ya no nos resulta útil o beneficioso. Esto puede deberse a diversos factores, como el miedo al cambio, el temor a lo desconocido o la inseguridad.

Sin embargo, en ocasiones, aferrarse a algo que ya no nos sirve puede convertirse en un hábito dañino que nos impida avanzar y evolucionar. Por ello, es importante aprender a soltar aquello a lo que estamos apegados, ya sea una relación tóxica, un trabajo que nos hace infelices o un comportamiento nocivo para nuestra salud.

A continuación te ofrecemos algunos tips que te ayudarán a dejar de aferrarte a aquello que ya no te sirve:

– Identifica lo que te está impidiendo avanzar. Para poder soltar lo que ya no nos sirve, es necesario primero identificar qué es lo que nos está impidiendo avanzar. ¿Es el miedo? ¿La inseguridad? ¿La falta de confianza en nosotros mismos? Una vez que hayamos identificado el problema, será más fácil afrontarlo y superarlo.

– Acepta que las cosas cambian. En la vida, todo es cambio. Las personas, las situaciones, los gustos… Todo está en constante evolución. Aceptar esto es fundamental para poder soltar aquello que ya no nos sirve y dejar de aferrarnos a lo que ya no es.

– Toma la decisión de cambiar. Una vez que hayamos identificado lo que nos está impidiendo avanzar y aceptado que las cosas cambian, tomaremos la decisión de cambiar. Esto significa que, si queremos soltar aquello a lo que estamos apegados, debemos estar dispuestos a tomar la iniciativa y hacerlo.

– Busca ayuda si lo necesitas. En algunos casos, dejar de aferrarse a lo que ya no nos sirve puede resultar muy difícil, especialmente si se trata de una relación tóxica o un hábito dañino. Si te encuentras en esta situación, no dudes en buscar ayuda profesional, ya que te puede ayudar a afrontar el problema de forma más adecuada.

¿De qué manera podemos perdonar y dejar ir?

El perdón es una de las emociones más difíciles de sentir y expresar. Sin embargo, es una de las claves para tener una vida feliz y saludable. Perdonar no significa olvidar, significa dejar ir el resentimiento y la rabia. El perdón nos libera del pasado y nos permite concentrarnos en el presente.

Existen muchos beneficios para perdonar. Permitirnos perdonar nos hace más fuertes y nos ayuda a manejar mejor el estrés. También nos permite establecer y mantener relaciones saludables.

Si bien el perdón es un proceso personal, existen algunas formas en que podemos facilitar el perdón. Aceptar que el perdón es posible, identificar los sentimientos negativos asociados con el evento, y elegir perdonar son tres pasos importantes para perdonar.

También es importante tener en cuenta que el perdón no es una excusa para qué la persona que cometió el acto pueda evitar las consecuencias de sus acciones. El perdón es un acto de amor y misericordia hacia nosotros mismos.

¿Cómo podemos liberarnos de los viejos patrones y hábitos?

Podemos liberarnos de los viejos patrones y hábitos de varias maneras. Primero, debemos identificar los patrones y hábitos que queremos cambiar. A continuación, analicemos por qué tenemos estos patrones y hábitos. ¿Son beneficiosos para nosotros o nos están causando problemas? Si nos están causando problemas, es importante tomar medidas para cambiarlos.

Existen varias técnicas que podemos utilizar para cambiar nuestros patrones y hábitos. Por ejemplo, podemos utilizar la técnica de la reprogramación mental. Esta técnica se basa en el reemplazo de pensamientos negativos o destructivos con pensamientos positivos y constructivos. Otro ejemplo es la técnica de visualización.

Esta técnica se basa en el uso de la imaginación para crear una imagen mental de lo que queremos lograr. Podemos utilizar esta técnica para visualizar el cambio que deseamos ver en nuestros patrones y hábitos. Otra forma de cambiar nuestros patrones y hábitos es a través del uso de afirmaciones.

Las afirmaciones son oraciones cortas y positivas que nos ayudan a focalizar nuestra mente en lo que queremos lograr. Por ejemplo, si queremos cambiar nuestro hábito de procrastinación, podemos utilizar la afirmación “Soy una persona que toma la iniciativa y no espera a que las cosas sucedan”. Otras formas de afirmaciones incluyen “Soy capaz de cambiar”, “Me merezco el éxito” y “Los cambios son positivos”.

También podemos utilizar técnicas de relajación para ayudarnos a cambiar nuestros patrones y hábitos. La relajación nos ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, lo cual nos puede ayudar a tomar mejores decisiones y a ser más productivos. Existen varias formas de practicar la relajación, como el yoga, la técnica de respiración diafragmática o el masaje.

podemos liberarnos de los viejos patrones y hábitos de varias maneras. Primero, debemos identificar los patrones y hábitos que queremos cambiar. A continuación, analicemos por qué tenemos estos patrones y hábitos. ¿Son beneficiosos para nosotros o nos están causando problemas?

Si nos están causando problemas, es importante tomar medidas para cambiarlos. Existen varias técnicas que podemos utilizar para cambiar nuestros patrones y hábitos, como la reprogramación mental, la visualización, las afirmaciones y las técnicas de relajación.

¿Cómo podemos tomar las riendas de nuestra vida y empezar de nuevo?

Desde el momento en que nacemos, nuestras vidas están marcadas por un sinfín de experiencias y eventos. Algunos de ellos son agradables y nos hacen sentir felices, mientras que otros son dolorosos y nos llenan de tristeza.

A medida que vamos creciendo, vamos aprendiendo cómo lidiar con todo tipo de situaciones, pero a veces nos encontramos en un punto en el que nos sentimos completamente perdidos y no sabemos cómo seguir adelante.

Cuando nos vemos enfrentados a una situación así, es importante tener en cuenta que siempre podemos tomar las riendas de nuestra vida y empezar de nuevo. No importa lo difícil que parezca en un primer momento, si tenemos la voluntad y el deseo de cambiar, podemos lograrlo.

Para empezar de nuevo, lo primero que debemos hacer es aceptar que la situación en la que nos encontramos no es la ideal. A veces estamos tan concentrados en lo que no queremos que vemos, que olvidamos lo que sí queremos. Aceptar la realidad es el primer paso para poder cambiarla.

Una vez que hayamos aceptado la situación, debemos tener claro qué es lo que queremos cambiar. Tenemos que ser específicos y no dejar nada librado al azar. Si no sabemos exactamente lo que queremos, es muy probable que no logremos nuestro objetivo.

Una vez que sepamos qué queremos cambiar, debemos poner un plan en marcha. No podemos esperar a que las cosas cambien por sí solas, tenemos que tomarnos la iniciativa y luchar por lo que queremos. El camino para lograr nuestros objetivos será difícil, pero si tenemos perseverancia y determinación, lo conseguiremos.

si nos sentimos perdidos y no sabemos cómo seguir adelante, debemos tener en cuenta que siempre podemos tomar las riendas de nuestra vida y empezar de nuevo. No importa lo difícil que parezca en un primer momento, si tenemos la voluntad y el deseo de cambiar, podemos lograrlo.

¿Cómo podemos transformar nuestro pasado para que nos sirva de lección y no de cárcel?

Nuestro pasado, si lo permitimos, puede ser nuestra mayor fuente de enseñanza. Podemos elegir el significado que le otorgamos a nuestras experiencias y, en consecuencia, aprender y crecer de ellas. Esto significa tener la capacidad de perdonar, dejar ir y aprender de los errores cometidos.

Si nos quedamos atrapados en el pasado, por el contrario, podemos permitir que nos consuma y nos impida avanzar. Vivimos en una especie de cárcel emocional, en la que nos alejamos de las nuevas experiencias y nos aferramos a las viejas heridas. Pero no tiene por qué ser así.

Existen diversas formas de transformar nuestro pasado para que nos sirva de lección y no de cárcel. Estas son algunas de ellas:

Aceptación: La primera y más importante etapa es la aceptación. Para poder transformar nuestro pasado, debemos aceptarlo tal y como fue. Esto significa darse cuenta de que lo que sucedió, sucedió, y que persistir en el negacionismo o la negación nos impedirá seguir adelante.

Aprendizaje: Una vez que aceptamos lo ocurrido, podemos empezar a ver las experiencias pasadas como oportunidades de aprendizaje. Lo que sucedió nos puede brindar valiosas lecciones sobre nosotros mismos, sobre los demás, y sobre la vida en general.

Perdón: El perdón es esencial para poder dejar ir el pasado. Debemos perdonar tanto a los demás como a nosotros mismos. Esto significa liberarnos de la rabia, el resentimiento y el rencor. Perdonar no significa olvidar, sino aceptar lo sucedido y seguir adelante.

Renuncia: A veces es necesario renunciar a lo que sucedió en el pasado para poder seguir adelante. Se trata de dejar ir el dolor, la tristeza y la nostalgia. Renunciar no significa olvidar, sino aceptar que las cosas ya no son como antes y que es necesario seguir adelante.

Superación: La última etapa es la de la superación. Consiste en aprender de nuestras experiencias pasadas y en utilizarlas como trampolín para seguir avanzando. Debemos tener presente que el pasado no tiene por qué definir nuestro futuro. Y que, si lo permitimos, nos puede ayudar a crecer y mejorar como personas.

Conclusión

La importancia de soltar el pasado radica en que, si no lo hacemos, estaremos atados a él para siempre. Vivir en el pasado nos impedirá avanzar y evolucionar como seres humanos. Aprender a soltar el pasado es una cuestión de dejar ir lo que ya no nos sirve y darnos permiso para seguir adelante. Para hacerlo, es importante tomar conciencia de nuestras emociones y de los pensamientos que alimentan nuestro sufrimiento.

Luego, podemos practicar la aceptación y el perdón, ya que estos nos ayudarán a sanar las heridas del pasado. Finalmente, debemos aprender a vivir el presente de manera plena y consciente, ya que esto nos permitirá disfrutar de la vida y dejar de sufrir por lo que ya no está.